Una tarde de miércoles aparecía esta peluda rescatada por una pareja, en la perrera de Buenavista.
Desde el primer instante mostraba todo su buen carácter, confiado, sociable.
Nos los puso muy fácil desde el principio y se adaptó muy bien a su nueva circunstancia, que enseguida cambió gracias a Yolanda y su familia que la acogieron.
Posteriormente entraba en acción Carmen que nos habló de Riitta, una señora finlandesa que junto a su marido querían adoptar y les hablamos de Kora.
Se enamoraron de ella por una foto y la realidad engrosó el sentimiento.
La acogieron para ver si tanto ella como ellos se adaptaban y lo hicieron rápidamente y así se iniciaba la segunda oportunidad de nuestra querida peluda.
Hoy sin duda, 3 de febrero, es un día especial para ella y la familia sospeludera, porque hoy continúa lo que el hace un mes era el inicio de su nueva vida.
Gracias a todas las partes implicadas por hacer posible finales felices como este y sobre todo a sus adoptantes que no les ha importado los casi 8 años de Kora.
Juntos, lo logramos. Juntos cambiamos vidas!