Era un domingo en el que compartimos stand con los compañeros de MaluKreando, cuando conocimos a Rubio, un gato, y supimos su historia.
Acostumbrado a estar cuidado y alimentado, así como a recibir cariño de una persona que tenía un negocio el cual cerró, se quedó solo y desamparado. Si bien el resto de vecinos de la zona le procuraba comida, para él ya no era lo mismo.
Cariñoso, dócil, hizo las delicias de todos nosotros y pudimos disfrutar de su compañía y la demanda de sus mimos.
Tras contactar con la persona que se había convertido en su referente, lo rescató de la calle y nosotros ayudamos en el proceso, haciéndole los tests de leucemia, inmuno, castración, chip y vacunación, así como desparasitación, gracias tambien a la colaboración de Luziane de Malukreando y de la que hoy es su mami, las cuales hicieron generosos donativos.
Hoy Rubio se llama Ronny y es feliz y nosotros también lo somos, porque él no merecía otro final que no fuese este.
